Maruja Rolando en la VI Bienal de São Paulo
Por Costanza De Rogatis
Maruja Rolando participa en la VI Bienal de São Paulo en octubre de 1961, junto a Teresa Casanova, José María Cruxent, Daniel González y Fernando Irazábal. Los cinco artistas forman parte del recién creado movimiento El techo de la ballena y viajan, por organización propia, a la ciudad brasilera. Juan Calzadilla es el seleccionador de las obras enviadas y es también quien escribe el texto curatorial de presentación del grupo, un escrito cuyo contenido será replicado en los artículos de medios impresos de nuestro país que reseñarán la participación en São Paulo.
Calzadilla hace vivo hincapié en el modo como considera que el lenguaje desarrollado por estos artistas –todos vinculados al informalismo y a El techo… – ha dinamizado el arte venezolano al liberarse de los formalismos abstracto geométricos, y advierte lo que recogerán también algunos diarios: la concreción de esta representación en la Bienal ha sido alcanzada a través del esfuerzo de los propios creadores y del apoyo de los organizadores del evento. Hace, además, mención a aquellos otros artistas informalistas que no pudieron conformar la representación venezolana, si bien sus trabajos reunían variadas y válidas muestras del nuevo movimiento plástico: Luisa Richter, Jorge Castillo, Gabriel Morera, Manuel Quintana Castillo. Aduce a las dimensiones de las obras y a las dificultades del envío, esta imposibilidad de participación.
No es, pues, una representación oficial, promovida por alguna institución cultural de nuestro país: es un esfuerzo mancomunado de los artistas que participan, intuimos debido a la mayor viabilidad económica de enviar las obras para presentarse. Es por este motivo que las piezas se exhiben Hors concours (fuera de concurso) y no pueden ser candidatas a premios. Quizás también por ello se hacen llamar el “Grupo de Caracas”, en tanto colectivo que demarca su propia personalidad, se autopostula al evento y no acoge la denominación del país al que “representan” al no haber sido propuestos oficialmente por ninguna institución cultural venezolana.
La información que remitimos en estas líneas ha sido extraída de algunos de los pocos artículos de periódico locales que se conservan y que refirieron la participación de los artistas en la VI Bienal. En ellos, poco se habla de las obras participantes, y más allá del entusiasmo generado por la pintura informalista como propuesta –y de la mención como novedad de la inclusión de dos mujeres en el grupo– no se reseña ni el proceso que se siguió para alcanzar esta representación, ni el desarrollo posterior a la muestra en Brasil.
Para poder ensamblar este texto, hemos acudido al “Arquivo Histórico Wanda Svevo” de la Bienal de São Paulo, que de manera sistemática ha organizado, catalogado y digitalizado material de los artistas y representaciones participantes desde la creación del evento. De esta forma, pudimos acceder a dos fotografías (negativos a color y blanco y negro) de las dos pinturas enviadas por Maruja Rolando –Moderato cantabile y La aventura, ambas de 1961–; una vista de sala, en la que se aprecian las piezas de Rolando y las de Cruxent; un dossier de artista con material variado –recortes de artículos y el impreso que se publicó para la representación de Venezuela (sin indicación de editor o impresor, ni ningún tipo de crédito más que el de Calzadilla)–; y finalmente dos cartas, escritas por J.M. Cruxent y dirigidas a Wanda Svevo (fundadora del archivo histórico de la Bienal): una, en la que solicita información sobre la ubicación de sus piezas, la otra, en la que le solicita el envío de posibles artículos de prensa relacionados con la participación del “Grupo de Caracas” en la Bienal, a los archivos de Juan Calzadilla y los suyos propios.
Lo que nos revelan las fotos de las obras de Maruja Rolando, quien solía titular sus obras con referencias musicales, pues era una gran melómana, es la clara influencia que por aquel período inicial tuvo Cruxent en su trabajo. Se aprecia el empleo de formas irregulares, orgánicas y viscerales, que ocupan la parte central del lienzo, así como el trabajo de texturas a través de la pastosidad de la pintura sugiere la presencia matérica de ese magma eruptivo al que hacían referencia los “balleneros”. Ni Moderato cantabile ni La aventura aparecen reseñadas en ninguno de los catálogos de individuales o colectivas de Rolando –anteriores o posteriores a la Bienal– por lo que conjeturamos que quizás realizó las piezas específicamente para la exhibición internacional y no fueron mostradas nuevamente.
Es importante señalar que apenas un año antes, en septiembre de 1960, Rolando había tenido su primera muestra individual en el Museo de Bellas Artes, y que El techo de la ballena había irrumpido en la escena artística en los meses previos a la fecha de apertura de la Bienal de São Paulo, en octubre de 1961, lo que denotaría un ambiente de gran ebullición creativa, pero también de gran síntesis y asimilación de procesos cambiantes en su lenguaje como artista. Estos son hitos mayores en la carrera artística de un creador, y atestiguan la solidez de la propuesta de Maruja Rolando y la rapidez con la que su indagación personal la llevaría a internalizar y asentar estas ideas vinculadas al informalismo, para posteriormente alejarse de ellas y emprender de manera individual, alejada de grupos o colectivos, una investigación que la acercaría a nuevas formas de producir obra, entre las que destacan su ulterior interés en la técnica gráfica.
Esta experiencia, cabe destacar, reafirma la necesidad de la concientización en torno a la importancia del levantamiento y organización sistemática de los archivos –los personales de los artistas, pero de manera especial, los institucionales– para la reconstrucción de una memoria historiográfica en el arte de nuestro país.
+ Dossier de artista de Maruja Rolando (VI Bienal de São Paulo)
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Documentos _ Archivo Sucesión Maruja Rolando, Cinap-GAN y Arquivo Histórico Wanda Svevo.
Cruxent, José María (30 de septiembre de 1961). [Carta a Wanda Svevo], Colección Arquivo Histórico Wanda Svevo.
Cruxent, José María (septiembre de 1961). [Carta a Wanda Svevo], Colección Arquivo Histórico Wanda Svevo.
Gómez-Sicre, José. “Diez kilómetros de arte. La VI Bienal de São Paulo”. Américas. Pan American Union, Washington, volumen 14, número 2, febrero de 1962.
“Cinco informalistas venezolanos en la VI Bienal de San Paulo”. El Nacional, Caracas, 22 de septiembre de 1961.
“Con audacia gratuita dos mujeres venezolanas llegan a la muestra de Sao Paulo”. Páginas, Caracas, 12 de octubre de 1961.
“Techo de la ballena al Brasil”. Élite, Caracas, 16 de septiembre de 1961. p. 79
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