Nubes para Colombia. Pedro Terán

 

Por Costanza De Rogatis

¿Es el artista un chamán? ¿Funge, como el hombre santo, de mediador entre aquello no visible/perceptible por los sentidos y el que observa? ¿Revela a través de acciones y ritos, mediante el lenguaje, lo oculto? ¿Y qué sería entonces el arte? ¿La develación en sí misma? ¿Lo develado?A través de la utilización de objetos que remiten al poder del chamán –aquel designado como vínculo entre lo mágico y lo real– Pedro Terán realiza en Nubes para Colombia una alegoría del propio acto creativo, en una acción que habla indistintamente de los medios que permiten, tanto en el mito como en el arte –que alguna vez fueron, la misma cosa– establecer vínculo, contacto con lo otro.

El artista, vestido de blanco, desenvuelve en secuencia tres telas que cubren el lienzo –también blanco– en el que sentado, oficia el acto ceremonial, mientras se escucha el agitar de una maraca: una tras otra alza frente a su rostro tres telas –amarilla, azul y roja–. A cada una le corresponde a su vez una polaroid, que el artista muestra al público –polaroid y nubes, polaroid y retrato de Terán, polaroid y maraca emplumada–. Se despoja entonces el artista/oficiante de sus ropas, ata sus genitales y se cubre el cuerpo de polvo dorado, referencia al lugar mítico de riquezas y frustradas expediciones en el Nuevo Mundo. El lienzo blanco, ahora descubierto, es intervenido por el chamán, trazando un triángulo y escribiendo con letras en esténcil, tres palabras: arte-artista-público, tríada estampada recurrentemente en las paredes del Museo de Bellas Artes en su exhibición de 1976, Blancas Paredes. Entrega a los espectadores polaroids que “detuvieron” nubes, y de regreso al espacio del manto blanco, devela la maraca emplumada, que ofrece con ambas manos, momento en el que se detiene el sonido que acompañó desde el inicio la acción, para indicar así el fin del performance.

 

Se establecen diversos paralelismos entre el acto creador y la acción chamánica: la más evidente quizás, la presentación de un designado –artista y chamán– como mediación entre el público y la obra, entre el creyente y el mundo espiritual, que prepara su cuerpo para entrar en trance y transformarse –alusión al tránsito de la levitación y el vuelo, retomado posteriormente en otras obras por Terán–; pero también a través de la fotografía de los objetos que sirven al rito a través de las polaroids, que muestran la dualidad entre objeto y representación, ser y parecer, realidad y evocación. Entendidas así, estas polaroids son también objetos mágicos, réplicas del mundo exterior, rastros del contacto con el original, mezcla de material e inmaterial, como las propias nubes fotografiadas y que sirven de título de la acción. Explica el artista:

El título de la performance apunta hacia otra intención implícita en este trabajo, se busca un «Contacto» y significativamente éste se establece a través de una entidad etérea pero igualmente corpórea como lo son las nubes. Estas nubes simbolizan para mí una energía necesaria vital, y mi papel (si es que el artista es necesario y cumple alguna función) consiste en generar esa energía, sobre todo en este continente esa energía es necesaria. Continente nuestro tan cercano y tan lejano.

Nubes para Colombia, si bien pensada para una “exposición fallida” (según el propio artista en su statement) fue presentada por primera vez en el marco del Primer Coloquio Latinoamericano de Arte No Objetual y Arte Urbano organizado por el Museo de Arte Moderno de Medellín en 1981, con gran éxito entre público y crítica. Posteriormente, en el Museo de Bellas Artes de Caracas, en el marco de Acciones frente a la plaza, en una especie de performance “fuera de sede” pues en su mayoría las piezas habían sido desarrolladas en la sala de exposiciones de la Gobernación del entonces Distrito Federal, frente a la Plaza Bolívar. Hacia finales de ese mismo año 81, presenta de nuevo Nubes… en el Museo de Arte Contemporáneo Francisco Narváez, en Porlamar, en el evento Acción en Margarita, junto a otros artistas.

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Documentos _ Archivo Pedro Terán:

-FUNDARTE. (1981). Nubes para Colombia. Pedro Terán. [Folleto]. Caracas: Autor
-Museo de Arte Contemporáneo Francisco Narváez. (1981). Acción en Margarita. [Invitación]. Porlamar: Autor.

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